Si sientes que no tienes tus finanzas bajo control y siempre hay problemas dando vueltas por tu cabeza, esto podría significar que tienes algunos malos hábitos financieros que debes cambiar.
Esto es una buena noticia, porque significaría que tu mala situación financiera no es debido a falta de educación o conocimiento, sino a la serie de acciones que realizas en el día a día (a veces sin darte cuenta.
Veamos en este artículo 5 malos hábitos financieros que podrías tener, y claro, como deshacerte de ellos.
1. Gastas en Automático
Solo por traer la tarjeta o efectivo no significa que tengas que gastar.
Y no solamente estamos hablando de gastos hormiga, sino que podrían ser otros gastos más grandes y que hacemos sin pensar en cómo podrían afectar nuestras finanzas en el mediano plazo. Si en este momento te pones a buscar en tu casa y encuentras varias compras que hiciste en su momento y que ya no usas, entonces tienes este hábito de gastar en automático.
¿Cómo dejar de gastar en automático?
Para empezar, hay que saber qué cosas son realmente importantes para nosotros y en las cuales nos podemos permitir gastar dinero… pero dejando de gastar en todo lo demás que no nos aporta nada.
Toma una libreta, agenda o papel y escribe 2 cosas… solo 2, en las que te gustaría poder gastar sin culpa. A partir de hoy, solo gasta en eso.
Claro, no vas a dejar de gastar en renta, despensa, ni otros gastos básicos, pero sí en todas aquellas cosas extra que antes comprabas casi sin pensar o porque “se te atravesaban”. Teniendo esta lista de tus 2 prioridades serán mucho más consciente con cada compra que hagas.
2. Esperas a que lleguen los gastos predecibles
Claramente sabes cuándo es el cumpleaños de tus familiares, el 14 de febrero o el 24 de diciembre… ¿Por qué entonces no estás ahorrando de una vez para estos gastos predecibles?
Lo que solemos haces es dejar la vida pasar y cuando llega esa fecha, nos endeudamos, pedimos un crédito o lo que sea, todo por no haber planificado anticipadamente. Y todavía peor… pagamos intereses.
Los intereses son el enemigo de las finanzas, es básicamente regalarle dinero al banco que podríamos destinar a nuestros propios objetivos de hacer las cosas de forma correcta.
¿Cómo solucionar este mal hábito?
Muy sencillo; en cuanto sepas que vas a tener que hacer un gasto fuera de lo normal, empieza a planear cuanto debes ahorrar cada mes hasta la fecha del gasto.
Esto lo puedes hacer con mi plantilla, en la cual defines un monto objetivo, el tiempo disponible para ahorrar y automáticamente te desglosará todo para que puedas ir siguiendo el plan. Claro, eso es fácil de calcular ya que solo es una división, pero la plantilla también te permite tomar en cuenta el impacto de la inflación si es un ahorro a mediano o largo plazo.
3. Te comparas con otros y gastas para impresionarlos
Ya sabes, este famoso: gastar dinero que no tenemos para comprar cosas que no queremos, solo para impresionar a gente a la que no le importamos.
O quizás también podría ser una comparación con otras personas de tu circulo social, las cuales hacen un viaje o se compran un coche el cual te hace preguntarte… ¿y por qué yo no me lo puedo permitir? ¡Claro que puedo!
Y haces un gasto por comparación.
Nota que este hábito no es necesariamente con el primero de gastar en automático, sino más bien hacer gastos por impresionar a otras personas.
¿Cómo evitar gastar por comparación?
De hecho, igualmente la mejor forma de eliminar este hábito es regresando a la lista de 2 prioridades del habito anterior, ya que con esta, aunque otras personas gasten en cosas que te puedan llegar a impresionar, podrás ser consciente de que son SUS prioridades, no las tuyas.
4. Te gastas todo tu dinero
Si tienes este mal habito, seguramente la razón sea que estas intentado ahorrar lo que te queda después de gastar, en lugar de gastar lo que te queda después de ahorrar.
Claro que hacer este cambio es complicado, pero es importante hacerlo porque si no caemos en la Ley de Parkinson, la cual nos dice que una tarea va a tomar todo el tiempo que le sea asignada. Esta ley está enfocada en la productividad, pero si lo llevamos al mundo de las finanzas personales, significaría que nuestros gastos van a abarcar todo el presupuesto que le sea asignado.
Esto quiere decir, que si no apartamos desde el inicio un porcentaje a nuestras inversiones, siempre buscaremos la forma de quedar en ceros a final de mes con el dinero que tenemos disponible.
¿Cómo no gastarte todo tu dinero?
Para evitar que la Ley de Parkinson actúe en tu contra, ahorra desde que te llega el dinero; de esta forma ya no estará a la vista y sabrás que no es dinero disponible, entonces buscarás como arreglártelas para solo gastar ese dinero.
Lo ideal sería encontrar la forma automática de ahorrar la cantidad correcta, y no que a mitad de quincena nos demos cuenta que no nos alcanzó y tengamos que hacer dinero de nuestras inversiones.
Quizás sea de los hábitos más complicados de esta lista, pero poco a poco seguro lo lograrás y valdrá totalmente la pena.
5. Dejar que tus deudas se acumulen
Muchas veces sabes que tienes deudas, que por ahí tienes unas tarjetas de crédito que pagar y que has comprado más de lo que deberías, pero quizás ni siquiera sabes exactamente cuánto debes. Podrías tener miedo de conocer el estado real de tus finanzas.
Eso podría ser más grave que el habito numero 1, ya que no solamente gastas en automático el dinero que tienes… sino que ahora gastas dinero que ni siquiera tienes.
¿Cómo solucionar esto?
La solución, aunque suene un poco romántico, es sentarte a revisar todos tus estados de cuenta, pero no con una mentalidad de castigo o remordimiento, sino solamente de curiosidad. Quieres conocer el estado de tus finanzas y ya.
No vas a buscar culpables ni soluciones por el momento. Solo estás buscando ese monto total que debes.
Este es el primer paso para solucionar el problema, y a partir de ahí puedes ir dando los siguientes como pagar un poco más del mínimo en tus tarjetas de crédito, hacer presupuestos, dejar de gastar en más cosas innecesarias, etc.
Te recomiendo que leas: Los 7 hábitos de la gente con buenas finanzas