BONOS y BONDES D, entre las varias opciones de inversión que existen en cetesdirecto, estas usualmente ofrecerán rendimientos más atractivos, ¿qué tan buenas inversiones resultan?
Cuando invertimos a través de cetesdirecto.com, CETES no es la única opción que tenemos. Podemos encontrar BONDDIA, que es un fondo de inversión líquido en el que el dinero que no se invierte en otro activo, se deposita. De el ya he hablado más a detalle en este otro artículo. También tenemos ENEFRIN, un fondo que invierte en energía, a través de bonos de PEMEX o CFE por ejemplo. Y UDIBONOS, que nos ayudan a proteger nuestro dinero de la inflación. De estos dos también ya hablé en este artículo.
En este artículo, sin embargo, quiero hablar de las otras dos opciones que podremos encontrar: BONOS y BONDES D. Hablemos entonces de cómo funcionan estos instrumentos, y cómo se comparan contra una inversión tradicional en CETES.
BONOS
Los BONOS (ese es su nombre, si resulta confuso, podemos llamarlos por su otro nombre: BONOS M) son bonos de desarrollo del gobierno federal que pagan una tasa de interés fija. La primera gran diferencia con los cetes es que para invertir en ellos debemos de hacerlo, en la mayoría de los casos, a 3, 5, 10, 20 o 30 años. Plazos mucho más grandes que en los CETES que nos permiten invertir en plazos desde 28 días.
Otra gran diferencia es la forma en que pagan los intereses. Mientras que los cetes los compramos a una tasa de descuento (digamos $9.50) y los intereses se pagan porque al final del plazo cada CETE ya vale sus $10 completos, los BONOS pagan intereses cada 182 días (6 meses), además de regresar la inversión inicial al final del plazo. Cada BONO tiene un costo de $100, entonces las ganancias no suceden al final del plazo, sino a través de los intereses que se van pagando.
Aunque, toma en cuenta que además, a pesar de que cada BONO tiene un precio nominal de esos $100, el precio de mercado (el precio al que lo compras), puede ser mayor. Por ejemplo, hoy podrías comprar un BONO a 30 años por $105, aún te dará los intereses cada 6 meses, pero al final del plazo, solo recibirás el precio nominal ($100), independientemente del precio al que lo compraste.
Y es que, como son plazos largos, existe un mercado secundario. Existe, por supuesto, el mercado primario en cetesdirecto, pero podemos comprar y vender bonos en el mercado secundario a precios distintos. Esto, sin embargo, tendrá que ser a través de la bolsa mexicana de valores, entonces en brokers como GBM+ podrás encontrar “m5trac” o “m10trac” (bonos a 5 o 10 años).
Tasa de interés.
Ahora, la tasa de interés que pagan los BONOS se determina desde que se emiten y no cambia, es una tasa fija. Esta puede ser una tremenda ventaja cuando crees que la tasa de referencia del Banco de México va a bajar, porque podría significar asegurar una tasa alta por un largo plazo de tiempo. Por el otro lado, si crees que va a subir, quizás estás “amarrando” tu dinero a una tasa baja por ese plazo.
Ya sé qué podría estar pasando en esa cabecita tuya, pero en lugar de especular, lo mejor es elegir BONOS cuando queremos invertir a plazos más largos y asegurarnos de hacerlo en instrumentos realmente seguros. Como los CETES, los BONOS están respaldados por el Gobierno Federal.
BONDES D
Los BONDES D, como los BONOS, también son bonos de desarrollo del gobierno federal, pero al contrario de los BONOS, la tasa que pagan no es fija, sino que depende del periodo en que se paga el interés. Estos bonos de desarrollo se subastan a plazos de 3, 5 y 7 años, también muy superior a CETES pero no hay opciones a tan largo plazo como con los BONOS.
Lo que si es similar a los BONOS es la forma en que pagan los intereses. Cada BONDE D también vale $100, y las tasas de interés se pagan cada cierto plazo, no hasta el final. En el caso de los BONDES D, los pagos son cada 28 días.
Sin embargo, como mencionaba, esta no es una tasa fija, sino una tasa que será diferente cada 28 días y se determinará componiendo diariamente la tasa a la cual las instituciones de crédito y casas de bolsa realizan operaciones de compraventa y reporto con títulos bancarios, esta tasa es conocida como tasa ponderada de fondeo bancario.
En otras palabras, cada 28 días se calcula una nueva tasa calculando el promedio ponderado de las tasas negociadas durante esos 28 días entre los bancos. Esta tasa, sin embargo, esta muy relacionada a otras tasas de referencia que publica el Banco de México, incluida la tasa CETES.
Con este tipo de inversión, no estamos “amarrando” ninguna tasa a largo plazo (como lo hacemos con los BONOS), pero si comprometemos a tener nuestra inversión en estos bonos durante plazos más largos a CETES.
Conclusión
Los bonos de desarrollo nos permiten invertir a plazos más largos que CETES, facilitando nuestra inversión en bonos gubernamentales cuando nuestro objetivo es invertir por varios años. Si sabemos que no haremos retiros de nuestra inversión en 5, 10, 20 o 30 años, los BONOS M pueden ser una excelente opción, que además nos permiten asegurar una tasa de interés por todo el plazo. En especial en este momento (29 de octubre de 2020) en que la tasa CETE está en 4.25% aproximadamente, podemos comprar BONOS a 30 años que pagan 7.15%.
Los BONDES D, por el otro lado, aunque a veces paguen tasas más altas que CETES, no nos permiten asegurar ninguna tasa a pesar de comprometer nuestra inversión por plazos más largos. Como con el caso de BONDDIA, no dejes que la tasa publicada te engañe y haga pensar que esa tasa será la que recibas, porque al contrario de con BONOS o CETES, la tasa variará durante el plazo de inversión.