Mi más grande error financiero

Seguro has escuchado de alguien, al primo de un amigo quizás, que comete alguno de los errores financieros tradicionales, por ejemplo: usar una tarjeta de crédito como una extensión de su sueldo o esperar hasta los 50 años para pensar en su retiro.

Te quiero platicar algo, y es que, por años, mis propias finanzas estuvieron al límite. Aunque en su momento no lo aceptaba y pretendía vivir una vida en la que el dinero no era problema, lo cierto es que estaba a punto de matar a mis finanzas. Me encontraba a una quincena perdida de endeudarme; poco a poco la posibilidad de pagar intereses se acercaba, y se acercaba… cada vez más. Eso podía convertirse en una bola de nieve de deudas, y crecer, haciendo imposible el ahorrar y el invertir por años y años.

Sin embargo, este artículo es acerca de un error mucho más sigiloso. Un error que muy recientemente me he percatado que he estado cometiendo y que muy fácilmente todos podríamos cometer en algún momento de nuestra vida.

A este error lo he bautizado como Miseria Por Objetivos.

Déjame contarte sobre él.


¿Miseria por Objetivos?

Imagina (y si estás aquí, esto seguro no te costará mucho hacerlo) que tienes como meta mejorar algún aspecto de tu vida, digamos tus finanzas. Te encuentras un libro, un artículo, o quizás un video en YouTube que te invita, te inspira, te ayuda a establecer una meta.

Por ejemplo: “juntar $15,000,000 de pesos para mi retiro dentro de 30 años”.

Pones manos a la obra. Disminuyes tus gastos, aumentas tus ingresos y creas una estrategia que puedes seguir para lograr esa meta…

  • 1 año después tienes tus primeros $100,000 ¡gran logro alcanzado! Tus finanzas ahora son robustas, tus preocupaciones de dinero han disminuido considerablemente, e incluso eres más libre.
  • 5 años después tienes tu primer millón. ¡Wow! ¡Incluso unos años adelante de lo planeado! Podrás retirarte varios años antes de lo previsto, y casi nunca piensas en dinero —más que 5 minutos al mes cuando tienes que hacer tu inversión de siempre—.

Sin embargo, aunque viéndolo desde afuera puede sonar como algo muy bueno, estos logros realmente ya no significan nada para ti, los tomas como algo que es solo parte del proceso. ¡Más te valía lograr esas metas!

Así que, ves tu cuenta de banco con más de un millón de pesos, te encoges los hombros, y regresas a trabajar…

¿A qué te suena? Porque para mí es esto:
  • Tienes tu meta financiera. Genial.
  • Progresas hacia ella. Crucial.
  • Pero… ¡Te olvidas de disfrutar el camino!

Todo esto, en otras palabras, significa que nuestra felicidad no se debe de basar en los resultados. Que nos enfoquemos en el camino, no en el destino.

¡Ay! Que cosa más cursi. ¡A quién le importa! Mientras junte mis millones… mientras pueda comprar mi Porsche… mientras pueda retirarme a los 35…

Este error, a primera vista, no parece tener un impacto financiero. Sin embargo, nuestra salud financiera no se basa solo en los números, al menos un 50% de esa salud financiera proviene de nuestra psicología.

Y no me refiero necesariamente a nuestra salud emocional —eso platícalo con tu terapeuta— ,pero si me refiero al impacto que nuestro comportamiento tiene en nuestras finanzas.

Tan solo considera, que sí, es un error psicológico que de entrada no nos cuesta dinero, realmente no lo perdemos como tal. Sin embargo, puede ocasionar pérdida de dedicación.

Regresando al ejemplo anterior en el que juntas $1,000,000 de pesos, dos años y medio antes de lo planeado:

  • Puede suceder que como te has enfocando solamente en el resultado final, durante los siguientes dos años y medio no ahorras nada, después de todo vas años por delante. Pero entonces pierdes el hábito, tus gastos crecen, y reiniciar el proceso de ahorro se vuelve difícil. Una dificultad completamente innecesaria.
    • Si hubieras disfrutado desde el principio el proceso de ahorro, de ver a tus finanzas fortalecerse, de desafiarte a ahorrar más, a ganar más; sin importar que tanto te adelantes a tu meta, progresarías mejor.

  • O quizás no dejas de ahorrar, pero si pierdes la dedicación de seguir buscando el siguiente aumento de sueldo, el nuevo negocio que empezar, y al final, tus ingresos se estancan. Y deja tú que se estanquen tus ingresos, tu carrera profesional se estanca, tus habilidades se estancan.

Claro, esto es solo un ejemplo, tú te conocerás y quizás puedas imaginarte de una mejor forma cómo reaccionarías ante esta pérdida de dedicación.

A lo que voy es que, algo que a primera instancia no tiene un impacto financiero, una vez que contemplamos nuestro comportamiento, podemos identificar un impacto real. Nuevamente, nuestra salud financiera es 50% números, 50% comportamiento.

Generalizando, esta pérdida de dedicación es algo que puede ocasionar una pérdida real de dinero en el sentido que dejamos de buscar crecer. Todo porque solo teníamos en mente el resultado final, no el proceso.

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¿Cómo evitar la Miseria por Objetivos?

Entonces, para evitar que ahora o en el futuro seas víctima de esta Miseria Por Objetivos puedes hacer lo siguiente:

Conviértete en la persona necesaria.

Por ejemplo, si tu meta es ahorrar $1,000,000 de pesos, no te enfoques en el objetivo. Claro, debes establecer un plan con los pasos a seguir para alcanzarlo, pero lo que tienes que buscar realmente es convertirte en una persona ahorradora. Así dejas de perseguir el objetivo para disfrutar del proceso.

Cuando te conviertes en una persona ahorradora, ahorras no para llegar a un objetivo, ahorras simplemente porque es quien eres, es parte de tu identidad.

Disciplina >>> Motivación.

En pocas palabras… a la ***** la motivación. La disciplina es mucho más importante que la motivación.

Hay días en que no tienes la motivación de pararte a hacer ejercicio o de comer lo que debes. Hay días en que no tienes la motivación de ahorrar porque se te atraviesa un teléfono nuevo, un auto nuevo o tu vecino presumiendo su reciente viaje a Europa.
Esto pasa, pero si entiendes que la disciplina es mucho más importante que la motivación, a pesar de lo momentos de poca motivación, tu estarás creando esa disciplina que te mantenga a flote.

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Este fue un artículo mucho más enfocado al lado psicológico de las finanzas, y es que, como quizás se han dado cuenta, es algo que intento incluir en mis videos porque de verdad es una parte importante de nuestras finanzas.

Mi plan actual es ir publicando artículos enfocados en la parte matemática de las finanzas, pero también otros artículos (como este) enfocados en la parte psicología. Pero claro, me gustaría saber su opinión, así que si me pueden dejar su opinión se los agradecería bastante.

Por último, me gustaría recordarte que si necesitas ayuda para crear tu presupuesto, crear tu portafolio de inversiones, planear tu retiro, e incluso aprender a generar nuevas fuentes de ingreso, puedes adquirir mi curso de finanzas personales. Además, si utilizas el código BLOG en la pantalla de pago, tendrás un 20% de descuento.